El gobierno mexicano pidió al gobernador de Nebraska, Pete Ricketts, reconsiderar su decisión de excluir del plan de vacunación anticovid a los migrantes indocumentados que trabajan en empresas de ese estado.
La cónsul de México en Omaha, una ciudad ubicada en el extremo este del condado de Douglas, estado de Nebraska, Guadalupe Sánchez, apeló a la ética del gobernador para vacunar a todas las personas que viven, trabajan y contribuyen al bienestar de la población y la economía de ese estado.
Ofreció el apoyo del Consulado para colaborar en beneficio de la población en estos momentos difíciles, e indicó que dos tercios de los más de 26 mil trabajadores en empacadoras de carne en Nebraska, Estados Unidos, son migrantes indocumentados, muchos de ellos mexicanos.
El director general de Sanidad de Estados Unidos, Jerome Adams, consideró que no sería ético negarle la vacuna a ningún migrante.