La invasión de sargazo en el Caribe mexicano -que en 2023 superó las 20 mil toneladas recolectadas- además de ser un problema ambiental y económico, también podría convertirse en una oportunidad de innovación científica.
Investigadoras e investigadores del Instituto Politécnico Nacional (IPN), en colaboración con el Tec de Monterrey, desarrollaron un proyecto pionero que transforma las inmensas cantidades de esta alga -el sargazo- en un valioso recurso para la industria de lubricantes sintéticos.
El equipo, liderado por la profesora Georgia María González, logró extraer aceite de sargazo y demostrar que su incorporación en un 10 por ciento a lubricantes sintéticos estándar mejora la viscosidad y la protección contra el desgaste de piezas metálicas en motores y maquinaria industrial.
Los ensayos revelaron que la mezcla reduce la viscosidad hasta un 15 por ciento a altas temperaturas y eleva el índice de viscosidad en 26 por ciento, lo que mejora la eficiencia energética y protege los equipos un 10 por ciento más de acuerdo con los resultados.
La investigación también explora otros aceites extraídos de microalgas y destaca la ventaja ambiental de utilizarlas sobre cultivos terrestres que tiene un fuerte impacto ambiental.