Luego de que en marzo de 2020 en Uruguay se diera a conocer la muerte de un hombre de 54 años, diagnosticado con esclerosis lateral amiotrófica, los legisladores de este país ingresaron un proyecto para despenalizar la eutanasia, sin embargo, dicha iniciativa quedó estancada hasta el 2022.
Después de tres años, el Senado uruguayo revivirá la discusión ya que este miércoles se determina a analizar, entre las bancadas progresistas, las de centro derecha e izquierda, el proyecto de ley para poder morir con dignidad.
De acuerdo con la propuesta del exlegislador Ope Pasquet, del Partido Colorado, se busca que toda persona mayor de edad y “psíquicamente apta”, se puede acoger a este derecho cuando esté cursando la etapa terminal de una patología incurable e irreversible” o que como consecuencia de esa enfermedad padezca sufrimientos que le resulten insoportables y atraviese un grave y progresivo deterioro de su calidad de vida.
“Es un proyecto potente, profundo y sensato. Potente al habilitar un derecho humano a morir con dignidad, profundo porque aborda la mayor cantidad de circunstancias vitales adversas y sensato, dado que sus definiciones y garantías se basan en legislaciones de eutanasia que tienen más de 20 años”, detalló el diputado Federico Preve.
La iniciativa refiere que el paciente que solicite la prestación deberá hacerlo por escrito y en persona ante el médico tratante, quien deberá informar sobre los tratamientos disponibles y evaluará, en un máximo de tres días, si se cumplen las condiciones.
Asimismo, señala que se requerirá de una segunda opinión y de seguir con la disposición, el paciente podrá expresar su última voluntad por escrito ante dos testigos y el médico procederá a cumplirla cuándo y dónde el solicitante lo decida.