La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declaró que la esterilización femenina no consentida, como violencia de género y obstétrica, otorgó el amparo de la ley a una mujer a la que le fue practicada una esterilización sin su consentimiento, durante la práctica de una cesárea en un Hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social, IMSS.
El pleno de la sala resolvió que a la mujer se le practicó una esterilización no consentida, pues su “consentimiento” no fue previo ni pleno ni libre ni informado, al realizarse en un ambiente de estrés, amenazas e intimidación durante el parto.
De acuerdo con las y los ministros de la sala esta esterilización constituyó violencia de género, pues el personal médico actuó conforme a estereotipos de género; se decidió esterilizarla sin su autorización a partir de una disminución de su capacidad de decisión en relación con su propio cuerpo.
La esterilización femenina no consentida constituye #ViolenciaObstétrica institucional como una forma de #ViolenciaDeGénero: #PrimeraSala
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— Suprema Corte (@SCJN) May 26, 2021