Cuba produjo unos cuatro mil equipos y dispositivos médicos para la atención a pacientes infectados con el nuevo coronavirus, dijo el miércoles el Gobierno, que enfrenta una serie de sanciones de Estados Unidos y una economía débil que ha agudizado la escasez en la isla caribeña.
El equipo médico, producido desde marzo de 2020, ha sido destinado a las salas de terapia intensiva, intermedia y centros de aislamiento para combatir la pandemia en Cuba, donde más de 75 mil personas han sido infectadas desde marzo pasado con 424 muertes, una de las tasas más bajas per cápita en el mundo.
Nuestro país se está ahorrando y se podría ahorrar muchos millones de dólares a partir de todos estos resultados de soberanía que hemos logrado”, dijo Eduardo Martínez, director de la empresa estatal Biocubafarma, en una presentación a periodistas.
Martínez encabezó un grupo de científicos de empresas biotecnológicas que presentaron una serie de equipos diseñados y producidos en la isla como ventiladores pulmonares, tomógrafo de impedancia eléctrica para monitorear la función pulmonar, reactivos y un dispositivo para detectar pérdidas auditivas en infantes de menos de año, entre otros.
A partir del bloqueo (embargo de Estados Unidos) a que estamos sometidos y la situación que tenemos en el país, nos hubiera sido muy difícil realmente tener los resultados que estamos teniendo en el combate a la pandemia (…)”, añadió Martínez en referencia a las más de 200 medidas tomadas por el expresidente Donald Trump para endurecer el embargo a La Habana.