Israel amenaza realizar una tercera fase de su incursión militar en la Franja de Gaza, luego descompletar la invasión del oeste de la ciudad del mismo nombre.
Por segundo día, el ejército israelí mantuvo la búsqueda de milicianos de Hamás en el Hospital Al Shifá, el más importante de la Franja de Gaza, en el que la ONU calcula que hay hacinadas unas 2 mil 300 personas, entre pacientes, personal médico y desplazados.
En el lugar, que Israel insiste es un centro de operaciones de Hamás, los soldados se tomaron fotografías, y aseguraron haber hallado la entrada de un túnel, además de armas, tecnologías militares y supuestas pruebas sobre los rehenes israelíes.
“Se han hecho descubrimientos importantes, la operación continúa y se lleva a cabo de manera precisa, cautelosa pero muy decisiva. Durante el último día, hemos completado la ocupación y limpieza de toda la parte occidental de la ciudad de Gaza”, dijo Yoav Gallant, ministro de Defensa de Israel.
Informó, además, que se encontró el cuerpo de la rehén israelí Yehudit Weiss, de 65 años, en un edificio, al costado del hospital.
La organización “Human Rights Watch” aseguró que los videos publicados por Israel en los que muestra armas supuestamente dentro del hospital, no son pruebas suficientes para violentar las leyes de la guerra, que protegen a personal médico y pacientes.
Pero, Israel hace caso omiso y ha llevado los combates a los alrededores del Hospital Bautista Al Ahli, el único del norte que aún funciona.
La media luna roja informó que las tropas israelíes cercaron el lugar con tanques, bloqueando la entrada y salida de heridos y personal.
Las tropas israelíes, además, tomaron el control operativo del Puerto de Gaza que, el cual aseguran, sin presentar pruebas, Hamás utilizaba como centro de entrenamiento.
La Franja de Gaza quedó nuevamente incomunicada por falta de combustibles.
“Sin combustible no hay comunicación, y sin comunicación se amplifica la ansiedad y el pánico”, señaló Philippe Lazzarini, comisionado General de la UNRWA.
La crisis humanitaria empeora día tras día.
Con el cierre este jueves de la última panadería, por la escasez de combustible, y el último molino de harina destruido, así como el invierno acercándose y ante la falta de agua potable, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) alertó que los gazatíes enfrentan una posibilidad inmediata de morir de hambre.
El alto comisionado para los derechos humanos pidió una investigación internacional por las presuntas violaciones del derecho internacional cometidas en el conflicto.