La esencia de los sueños latinoamericanos no es lujosa, sino vital y aunque sean sencillos, están más cerca de la utopía que de la realidad.
En la cinta “Mapa de sueños latinoamericanos”, dirigida por Martin Weber, las personas son retratadas con la aspiración del futuro: mejores sueldos, un país justo o salir de la pobreza.
Sea en Nicaragua, Cuba o México, los miedos arraigados a causa de las carencias se disfrazan bajo el velo de la esperanza, un mapa de sueños que viene trazado con las rutas del dolor.
Al sur de México, en la región del Istmo de Tehuantepec, un grupo de mujeres resiste para defender su mercado.
Las lidera Guiexhuba, incansable juchiteca que da título a la película y cuyo nombre zapoteco proviene de una Flor Blanca y tiene como pétalos a las mujeres que la rodean.
En la cinta “Guiexhuba”, dirigida por Sabrina Muhate, un grupo de hombres las amedrenta con una leyenda local para despojarlas del territorio que les pertenece.
A veces mucha gente se tiene que sacrificar para que la magia de un pueblo siga existiendo. Y en este caso Guiexhuba porta la herencia de sus abuelos, porta la lengua, porta el huipil y eso es lo que le da fortaleza para que ella pueda abrazar y voltear y decir: ‘quien viene detrás de mí también merece sostener esta herencia’. Y es un poco lo qué pasa con Guiexhuba: es una mujer que no es si no son las otras’’, aseguró la actriz Claudia Santiago.
Las dos cintas compiten en la selección oficial de Largometrajes Mexicanos y se encuentran de manera online en la página del Festival Internacional de Cine de Guanajuato: www.giff.mx.
